El caso de la niña croata que tras entrar en coma, al despertar empezo a hablar en perfecto alemán, idioma que tan solo había empezado a estudiar, mientras que era incapaz de expresarse en croata. Nos abre un mundo de posibilidades en el estudio de los idiomas. Ya que no es un caso único.
Es conocido que en casos de posesión diabolica, los endemoniados hablan en idiomas que teoricamente desconocen, latín generalmente, pero también arameo, sanscrito y otros idiomas asociados a la iglesia.
También hemos recibido noticias de una persona que tras una noche de copas y un poco ebrio empezo a hablar en catalán sin tener previamente ni pajotera idea. A esto sumamos el caso de los poliglotas que son capaces de aprender y hablar decenas de idiomas sin apenas esfuerzo.
Esto demuestra que en estados alterados de conciencia el cerebro es capaz de asimilar un idioma con apenas unas pocas indicios.
Tan solo es cuestión de tiempo que los neurologos descubran las areas implicadas en dichos procesos, para que con unas ligeras descargas electricas, quizas con la ayuda de algún famaco cualquiera pueda aprender un idioma sin esfuerzo.
¡Se les acaba el chollo a los catalanes y su jeringonza!
Tendrán que inventarse otra cosa para apoyar sus reinvindicaciones separatistas.
PD: Y otros escritos anticatalanes en el Crónicas.
Un tal Chomsky habla de la gramática innata.
ResponderEliminarAunque es mas recordado como activista político.
Debe existir una fase de desatollo cerebral que produce esa faculatad
En mi opinión el error de Chomsky es confundir la causa con el efecto. Que diría un filósofo escolástico.
Es evidente que la causa es el cerebro y el efecto la gramática.
Antonio Damasio parafraseando a Descates Dice: Existo luego pienso. Tengo cerebro luego hablo. Para que luego me digan que la lengua es un hecho diferencial de identidad nacional.
Fedrica
¡Buenos días, Don Jesús!
ResponderEliminarSe explicará con el tiempo, la ciencia está en ello.
He oído el caso esta mañana en la radio y no me ha sorprendido, pues se repite con cierta frecuencia. Lo fácil y lo ridículo es atribuirlo a espíritus, demonios y demás chorradas, pero yo sé que usted lo hace con el cachondeo que le caracteriza.
¡Abrazos!
A mi lo que más me ha gustado es eso de aprender idiomas cogiendo curdas. O sea, que si bebo champagne hasta caerme al suelo, aprenderé francés, si la cojo de whisky, aprenderé inglés, etc,.. ¿Esa puede ser la idea?. Falta descubrir ese mecanismo que enlace una cosa con la otra en nuestro cerebro. Con la de bares que hay en España, seríamos el país con más academias de idiomas.
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