En Massachusetts, el estado católico por antonomasia, 17 chicas no se si católicas o no, han consumado un extraño pacto para quedarse embarazadas...En España, un partido enfrentado a una extraña crisis elige una secretaria general, de la que se resalta su condición de madre soltera. Dos noticias que aparentemente no pueden estar relacionadas...pero...aquí pasa algo.
Estamos asistiendo al fracaso del Matrimonio como institución con innumerables divorcios y actos de violencia doméstica. (Recuérdese que el mismo Rajoy fue obligado...o sugerido a que se casará). Mientras Zapatero crea el Ministerio de la Igualdad...
Mujeres famosas como Angelina Jolie, Nikole Kidman, Madonna se dedican adoptar niños, cuando no a tenerlos con parejas poco estables, como Jennifer Lopez o Britney Spear...Muchas mujeres de clase alta y media hacen lo mismo. Mientras triunfa en medio mundo la película "Sexo en Nueva York" película cuyo principal argumento es el fracaso de las relaciones amorosas.
Todo indica estamos asistiendo al hundimiento de la era del PATRIARCADO. Adiós al macho...paralelamente triunfa el movimiento gay y metrosexual.
Pero...¡OJO! ¿Donde vamos a ir a parar? A ver si vamos a sustituir un modelo, ya dado por fracasado, por otro peor, como tantas veces a sucedido.
El patriarcado es un sistema irracional, pero el ser humano es irracional e intentar sustituirlo por otra cosa que no sabemos que puede ser, podría acaba malamente. Doctores tiene la antropología, pero el aumento de la violencia domestica, la pederastia y la prostitución a mi me dan mala espina.
La evolución es imparable, aunque nunca podremos saber si se trata de involución. Cuando se sepa, ya estaremos muertos, y ya se sabe, el muerto al hoyo...
ResponderEliminarUn saludo desde la cara oculta de la Luna.
No creo que esté "triunfando" el movimiento gay. Simplemente salen a la luz despúes de años de oscurantismo. Ahora se pueden besar en público en lugar de hacerlo entre penumbras en salas de cine, urinarios o solares abandonados.
ResponderEliminarEn cuanto a lo de "metrosexual", no sé qué coño es eso, ¿los que marcan paquete y muestran sus músculos de gimnasio en las playas y en los programas bobos de televisión?
No creo que lo que ha habido hasta ahora haya sido un "patriarcado", al menos al modo de que lo que hace siglos fueron los "matriarcados"
Tampoco creo que haya aumento de violencia, prostitución y pederastia. Hay la misma de siempre con más medios contando las noticias. (Recuerdo que en mi juventud me contó un actor viejo que, cuando él era niño, se corrió la voz entre la chavalería de que un tío se la estaba chupando a todos los chavales que quisiesen, y se formó una cola muy grande porque todos querían disfrutar su felación. Esta anécdota haría las delicias del obispo de Tenerife. Podría seguir contando casos para mostrar que poco o nada ha cambiado)
Vivimos en momentos de cambios.
ResponderEliminarSaludos.
Los franceses tienen un dicho que dice que cuanto más cambia todo, más es lo mismo ¿Donde estaban los pederastas maltratadores y prostitutas antes? Porque haberlos los ha habido siempre. Es lo que tiene la sociedad de la información que uno se entera de lo que antes no se enteraba, las tendencias y situaciones afloran y todo sale del armario y además nos ofrece todas las posibilidades del mundo de enterarnos de los por qués. Que privilegio.
ResponderEliminarConsidero que hoy en día tenemos la suerte de vivir un poco más "libres" en el sentido que la mente está más abierta a los cambios, antes ni tan siquiera se oía hablar de parejas homosexuales cuando al fin y al cabo las había como ahora, pero la información nos abre puertas que antes se mantenían cerradas. El tema de la violencia de género estaba ahí también y lo peor de todo era que encima se escuchaba..."por algo habrá sido..." y todo el mundo se hacía el loco, y la mujer aguantando.
ResponderEliminarCreo que los cambios están bien, tal vez son los planteamientos o el hecho de pensar que todo se va al carajo, pero digo yo...Y no se irá igualmente??? Entonces porqué no poder vivir con la libertad de hacer lo que uno quiera, sin perjudicar a terceros evidentemente.