Esta noche los barceloneses de bien, como Willy Smith en la película "Soy Leyenda" tendremos que atrancar las puertas, bajar persianas, apagar las luces y esperar al amanecer armados hasta los dientes. Una marabunta de zombies zumbados tomará las calles, pegándole fuego a todo lo que puedan y emborrachándose hasta reventar.
Se celebra, la verbena de San Juan, fiesta absurda como ninguna. Que comienza haciendo hogueras por doquier, con los consiguientes incendios, continua con el lanzamiento indiscriminado de petardos por grades y chicos, inconscientes y gamberros de todo pelaje. Como cada año, las urgencias médicas se colapsaran con todo tipo de accidentes y quemaduras.
No contentos con el fuego continúan con la juerga, en España sinónimo de borracheras, peleas, altercados, abusos y destrozos del mobiliario urbano y particular. Los pudientes podrán dejarse atracar por discotecas y garitos que convenientemente triplican y cuatriplican sus precios.
Al amanecer, ciegos hasta las cejas, cogerán los coches hasta las playas mas cercanas, donde si la policía no les ha parado y cofiscado coches y carnets, una masificación de personas enloquecidas dejarán toneladas de basura, mierda orines y vomitos, después de revolcarse y copular sin pudor a la vista de todo el mundo.
No seré yo, quien los critique porque intente olvidar por una noche la miserable vida que nos ha tocado en suerte, trabajos agotadores durante toda la semana, si de mas de 65 horas, porque aunque sean ilegales esa es la jornada normal de un currante español. Y luego dicen que se opondrán a la normativa europea. Para que legalizar, sin sin ley nos va mejor.
Que sensato fue Porcioles cuando prohibió las fiestas populares, con el inteligentisimo argumento que en Barcelona, cualquiera y cualquier día puede montarse un fiesta a su gusto. Pero con la llegada de los alcaldes "democráticos", las fiestas pasaron a estar patrocinadas y financiadas por el ayuntamiento. Nos dan el "circus", que el "panes" ya se lo quedan ellos.
Se celebra, la verbena de San Juan, fiesta absurda como ninguna. Que comienza haciendo hogueras por doquier, con los consiguientes incendios, continua con el lanzamiento indiscriminado de petardos por grades y chicos, inconscientes y gamberros de todo pelaje. Como cada año, las urgencias médicas se colapsaran con todo tipo de accidentes y quemaduras.
No contentos con el fuego continúan con la juerga, en España sinónimo de borracheras, peleas, altercados, abusos y destrozos del mobiliario urbano y particular. Los pudientes podrán dejarse atracar por discotecas y garitos que convenientemente triplican y cuatriplican sus precios.
Al amanecer, ciegos hasta las cejas, cogerán los coches hasta las playas mas cercanas, donde si la policía no les ha parado y cofiscado coches y carnets, una masificación de personas enloquecidas dejarán toneladas de basura, mierda orines y vomitos, después de revolcarse y copular sin pudor a la vista de todo el mundo.
No seré yo, quien los critique porque intente olvidar por una noche la miserable vida que nos ha tocado en suerte, trabajos agotadores durante toda la semana, si de mas de 65 horas, porque aunque sean ilegales esa es la jornada normal de un currante español. Y luego dicen que se opondrán a la normativa europea. Para que legalizar, sin sin ley nos va mejor.
Que sensato fue Porcioles cuando prohibió las fiestas populares, con el inteligentisimo argumento que en Barcelona, cualquiera y cualquier día puede montarse un fiesta a su gusto. Pero con la llegada de los alcaldes "democráticos", las fiestas pasaron a estar patrocinadas y financiadas por el ayuntamiento. Nos dan el "circus", que el "panes" ya se lo quedan ellos.
uis también es casualidad que ayer vi precisamente esa película. Pero bueno, a mi no me encanta esta fiesta, en otro blog hacía el comentario, siempre me han molestado los petardos y los graciosillos que no saben hacer más que tirarlos contra la gente. Por lo demás, he de hacer como bien dices bajar persianas, intentar insonorizar todo, tapones en los oídos, y bueno aguantar el calor con un ventilador al lado. El resto de acciones incívicas creo no van ya ligadas a esta noche solamente si no a la mayoría de noches que para muchos empiezan ya el jueves y no acaban hasta el domingo.
ResponderEliminarNo hay fiestas incivicas a mi parecer, sino más bien actitudes así. Y eso sí es peor, mucho peor.
Hola Jesùs, agrada saludarte desde nuestro paìs Colombia. Estarè leyèndote y tambièn alegràndome que esto de la tecnologìa, nos acerca hasta con personas que no conocemos.
ResponderEliminarUn abrazo y Dios te bendiga
Dina Luz
La verdad, es que en lugar de fiesta parece un encadenamiento de actos bandálicos, donde las consecuencias, en muchos casos son nefastas.
ResponderEliminarAquí, en Valencia está la "cordá" que me parece una barbaridad y un descontrol impresionantes.Los heridos brotan como las malas hierbas y lo del mobiliario no es tan terrible, porque habilitan "jaulas" enormes donde la gente se hincha a tirar petardos sin dañar nada material.
En fin,Jesús, que está bien divertirse, pero con civismo ¿no te parece?.
Besos.