¿Metalenguaje?

Por Navidad mi prima Montse ha vuelto a casa. Ella es de padres andaluces pero nacida en Barcelona, como su mismo nombre indica. Solo conocía Granada por las vacaciones de verano, pero hace unos meses se traslado a vivir a un pueblo de Granada. Pues bien, trae un acentazo granadino que echa de espaldas. Esto es muy extraño porque no pasa lo mismo con su marido. Lo que me lleva a interesantes reflexiones.
¿Tiene la lengua una memoria genética?
¿Como es posible que años y años de educación obligatoria y televisión monocorde, no haya acabado con los acentos?
¿Hay diferencias entre el habla de los hombres y las mujeres...que las hay?
Si la oyes hablar en su nuevo y adquirido acento notas una fuerza que yo diría telúrica, como si hubiera un especie de campo, similar al electromagnetico a su alrededor.
Esto también es muy interesante, porque ¿que conocemos relamente del lenguaje? ¿Unos sonidos articulados por unas glandulas organicas? Aquí hay algo mas, desconocido. Que nos hace preguntar como se aferran los nacionalismos a la lengua, contra toda lógica que sería habrirse a una comunicación mas amplia. Me temo que la lengua es un distintivo radical de cada pueblo que nos condena a vivir separados o no del todo unidos como una comunidad global, mas fuerte incluso que el color de la piel. Como extraterrestres en un mismo planeta