jueves, 27 de agosto de 2015

3º jornada. De Linyola a Balaguer

Sábado 8 de agosto.
A las 5:30 ya estoy despierto. Me cuesta despertar a Bea, pero es necesario salir cuanto antes para escapar del calor. Tendimos la ropa en el baño, no se ha secado del todo y la habitación esta muy humeda, el suelo mojado. Esto y el aire acondicionado me ha afectado a la garganta que empieza a picarme.
A las 7 ya estamos en la calle, dispuestos a empezar al etapa hacia Balaguer. Unos escasos 13 kms. En su mayor parte por caminos rurales de gravilla, al contrario de los caminos de Aragón que son de cantos rodados.
Por el camino nos para un paisano en coche, digo paisano porque es de cerca de mi pueblo, de Orce. Aunque lleva toda la vida en Cataluña, como yo. Se ha recorrido toda España a pie como pastor trasumante. Hablamos de esas cosas y de la inminente independencia de Cataluña.
Encontramos una casa deshabitada que tiene una mesa y unos asientos de piedra a la entrada, y naturalmente aprovechamos para parar y comer algo. También alimentamos un poco a los muchos gatos que hay por allí.
El camino continua entre arboles frutales, maizales y granjas de cerdos. Una economía cerrada, con el maiz y la fruta picada o que se cae de los arboles se alimentan a los cerdos, con cuyo estiercol se abonan los campos. Tal vez extremadura sea famosa por sus cerdos alimentados con bellotas, pero la carne de cerdo de Lerida debe ser la mas dulce del mundo.
Entre uno de esos maizales paramos y echo una pequeña siesta, un microsueño de unos minutos. En general paramos cada hora. Hacemos horas lectivas, 45 mínutos de marcha y 15 de descanso. Aun así antes de las 12 ya estamos en Balaguer. De nada ha servido madrugar y fastidiar a la pobre Bea, todo la mañana ha estado nublado y a la entrada de Balaguer está empezando a chispear.
Balaguer parece una población prospera, dividida en dos por el rio Segre, a una riva la ciudad antigua, y a la otra el ensanche. Y como otras muchas ciudades sufre un problema. La población antigua esta ubicada en una colina por necesidades defensivas, y la ciudad nueva se extiende por el plano. Gracias a esto se han salvado las casas viejas, ya que las nuevas se contruyen en el llano. Pero aunque las casa antiguas son mas bonitas que los bloques de pisos o los chalecitos, también son mas incomodas, con escaleras, poco espacio y calles empinadas. Resultado, los ricos se han ido al ensanche y las casas viejas se venden  o se alquilan a gente con menos recursos, lo que a la larga el casco antiguo se va conviertiendo en un gheto que se deteriora irremisiblemente. Por suerte Balaguer todavía no está muy deteriorado. El casco antiguo esta muy bien y su fachada al rio muy bonita.
Nada mas entrar se oye un ruido de coches corriendo y derrapando, se ve que están haciendo unas carreras en un circuito cercano, el ruido de estos coches se extiende por toda la ciudad.  Paramos en el primer bar que encontramos y pedimos los respectivos cafe con leche para Bea y limonada para mi. Como el albergue lo gestiona el ayuntamiento preguntamos por el mismo.
Esta en la plaza Mercadal, que resulta una plaza singular donde cada sábado hacen mercado. Al llegar el mercadillo está en plena actividad, con lo que entre tanto barullo unos cargados con mochilas no llaman mucho la atención.
En el ayuntamiento nos sellan la credencial, nos dan las llaves y un juego de sabanas de papel por cinco euros que vale el albergue. El aguacil nos indica el camino, y hacia allí vamos.
El albergue es nuevo, recién abierto este año. Es la casa restaurada de la escritora Teresa Pamies, fallecida recientemente. Es de verdadero lujo




. Allí encontramos a una peregrina, la Daría. Una americana de California, arquetipo de chica californiana, rubia, alta, guapa y de piel trigueña. Esta haciendo el Camino de Santiago en bicicleta al reves, desembarcó en Santiago y esta camino de Barcelona.
Tras llegar al albergue comenzamos el ritual de rigor, deshacer la mochila, ducharnos (usando la ropa interior como esponja) y lavar la ropa. Y salir a comer. Al menos queremos comer una vez de menú,  y cenar cualquier cosa de lo nuestro.
No encontramos restaurante de nuestro gusto, nos pareció todo muy caro. Estabamos mal acostubrados a las poblaciones donde hay muchos temporeros y los precios son mas baratos. Acabamos en una pizzeria. En la plaza encontramos a Daria junto a un amigo. Bendito internet que te permite hacer amigos en cualquier parte del mundo. Cualquier dia me apunto a eso del Tinder.
Volvemos al refugio, esta lloviendo, pero conseguimos llegar sin mojarnos demasiado. Me hecho la siesta.
Al atardecer salimos a visitar la ciudad, subimos a la catedral, está cerrada, pero tiene unas vistas extraordinarias de la ciudad.
Bajamos abajo a la ciudad nueva a hacer unas compras, las habituales botellas de agua, leche y otras vituallas. Yo también me compro unas zapatillas, las chaclas japonesas que llevo me hacen daño y en solo dos dias ya me ha provocado una ampolla entre los dedos. Tomamos unas cervezas en la plaza Mercadal y volvermos al albergue a cenar y dormir.
Yo me acuesto pronto, Bea se queda fumando y mirando por la ventana.


4 comentarios:

  1. Los purines, deshechos líquidos y fecales de los cerdos, están restringidos actualmente por su toxicidad. Una mierda seca puede abonar, pero si se abusa resulta perjudicial en extremo y esto es lo que pasa con los cerdos, que son tantos, que se sale de madre porque se usan sin dar tiempo a que se sequen.

    Los cascos antiguos de las poblaciones y ciudades tienen todas este problema, que al ser poco habitables, los alquilan gente con pocos recursos, con lo que se van degradando cada vez más. Una lástima a la que nadie pone solución por motivos económicos.

    Muy buena pinta tiene el albergue. Yo estuve años yendo a Mas Banyeres, una casa donde residió Mossèn Cinto. Ahora es una casa de colonias y llevaba allí a mis niños del cole Lola Anglada cada Semana Santa. Parece esta de Teresa Pamíes, completamente reformada.
    Cada vez que subía o bajaba las escaleras y entraba en todas las estancias (yo podía hacerlo al ser responsable de un grupo de alumnos, ellos tenían el paso restringido), me imaginaba a Mossèn Cinto allí. Es una sensación curiosa e interesante.

    ¿Chanclas japonesas? ¡Tasloco tú! Yo no las soporto. Esa cosa entre los dedos es un tormento.

    Buenas fotos, felicito a Bea efusivamente.

    ResponderEliminar
  2. La verdad es que yo no vi a la Pamies por ningún rincón. Quizas si estaba allí.
    La degradacion de los centros si que es una pena, aunque el de Balaguer todavía no lo está mucho. Pero por ejemplo, Fraga que es una ciudad similar si que esta en muy mal estado. Y peor es lo de Tamarit, donde han tirarado muchos edificios antiguos....a saber que construiran en los solares.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bueno, recuerda que soy médium. Estoy segura de cual era su dormitorio después de haber pasado por todos año tras año. Uno de la planta superior, pequeño, pero que se abre a una gran terraza cubierta, la cual tiene escalera exterior que lleva justo a la capilla.

      Esa capilla llegué a verla en su forma original el primer año, aunque no se usaba como tal.
      Al año siguiente la habían convertido en... ¡una discoteca! ¡Ja ja ja! Y no, no apareció Mossèn Cinto con una espada flamígera, je je je...

      En los solares que dices construirán horrores modernos, degradando el patrimonio histórico hasta hacerlo desaparecer. La pasta es la pasta.

      Eliminar
  3. ¡Buen día, sábado 31 de Octubre!, algo alejado ya de las fechas del peregrinaje jesusiano, pero aquí estoy comentando feliz.
    Las siestas de Bea son una constante en esta estupendísima narración, aunque, dicho al pie de la tercera jornada, parece una incongruencia, y es que yo - lo digo para los lectores comentadores del futuro - estoy haciendo el camino de comentarios de arriba a abajo, lo mismo que la peregrina bicicletera californiana Daría hace el Camino a la inversa, de Compostela a Barcino. "Rubia, alta, guapa y de piel trigueña", un detallazo para los lectores por parte de este excelente narrador que es Don Jesús Valdivieso. Me imagino a la hermosa Daría pedaleando con sus dos hermosas y largas piernas al desnudo, antes de meterse en el avión que la llevará a California, en donde ya nada le recordará a la magía del Camino conchero, a sus baretos, albergues y sorpresas después de cada curva,
    Bonito encuentro con su paisano de Orce, el mundo es un pañuelo lleno de extraños y conocidos. Yo me encontré algunas veces con peregrinos que había conocido en años anteriores.
    ¡Jo, lo de la "inminente independencia" ¿es un deseo, un sarcasmo o un presagio?!, ¡jeje!
    Ya le he comentado en otro episodios que el Camino de Bea y usted es un tanto atípico. Ahora me los encuentro alimentando a gatos. Yo no pasé de alimentar perros, como casi todos los peregrinos típicos, ¡jajajaja!
    Lujosímo el albergue de Balaguer, uno de esos "momentazos" del Camino que sde agradecen mucho.
    ¡Ya solo me quedan dos jornadas!
    ¡Hasta el próximo sábado!

    ResponderEliminar

Gracias por vuestros comentarios, en breve serán publicados y pasaré por vuestros blogs.